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Tocadiscos

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AnnMarcus63's avatar
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"¿Qué harías si  la luz se va por la noche?”


Las velas amarillentas iluminan la habitación forrada de madera, con su débil llama de un color azul muerto que bailaba con delicada fuerza de un lado a otro. Como si trataran de distorsionar la sombra que a duras penas se formaba en la pared, como si trataran de dejarme completamente ciego.

La tormenta que comenzaba fuera había destruido el generador de electricidad de la cabaña, mi amigo estaba en estos instantes conduciendo a la estación de control para que un técnico arreglara el problema, mientras tanto, yo esperaría. Tratando de no mirar por sobre mi hombro cada cinco segundos para verificar que la sombra en la pared sea mía y de nadie más.

“Está bien, todo está bien” me dije mientras pasaba una mano sobre la diminuta luz de la vela.

Era ridículo sentir miedo -no- sentir los nervios de punta solo por el hecho de estar solo en la cabaña, completamente a oscuras. Era ridículo puntualizar mi miedo irrelevante a la oscuridad, para que al final me convirtiera en la burla por el resto de mi vida.

Tenía que superar ese miedo irracional a estar solo en la oscuridad.

“Está bien, todo está bien”

Mi piel se eriza bajo mi camisa y ese cosquilleo agrio al estar expuesto, sube desde mi espalda hasta donde termina mi cuello. Dejó escapar una pesada bocanada de aire.

Se trataba de una simple brisa de viento helada y húmeda.
 
Miro arriba y abajo, de un lado a otro, tratando de identificar la ventana por la que pudo haber entrado la ventisca.

Las llamas danzan broncamente. Las sombras sobre la pared se distorsionan. Mi silueta se estira hasta atravesar toda la habitación, se mueve y se levanta.

No

Esa silueta no es mía, ese no soy yo.

Las llamas se apagan

Todo queda  sumido en una pesada y penetrante oscuridad.

Lentamente me incorporó, estoy de pie en el centro de la habitación. Estiro mis manos para tratar de alcanzar la pared más cercana. Mis piernas chocan contra el filo de un mueble; busco los fósforos entre los objetos de la mesita de café, nada, busco en la repisa que esta sobre la mesa, nada.

Algo rasgó la madera lentamente, haciendo resonar el sonido como un eco interminable dentro de mi cabeza. Es ahí cuando me doy cuenta que estaba aguantando la respiración; respiro y cierro los ojos.
Retrocedo de espalda con pasos torpes, solo quería llegar a la pared, nada más.
Mi cuerpo se estremece cuando me topo con algo, el frio escuece mi espalda, me doy vuelta, decidido a encontrar la puerta de salida, pero, mi mano no encuentra madera, es….algo más -algo extraño- ¿Qué es eso? Puedo sentir la textura pastosa entrar entre mis dedos, subir por mi muñeca hasta mi antebrazo

¿!Qué es esto!?

Es…..es….. La oscuridad  ¡es tangible! Puedo sentirla. Se hunde entre mi piel y mordisquea mis músculos, como un animal hambriento.

Retrocedo rápidamente, mis manos salen de la nube de oscuridad, doy vuelta y  me pego contra la pared intentando huir de lo que estaba ahí conmigo. Mis jadeos son los únicos que rompen el silencio, el tamborileo de mi corazón sobre mis costillas, el rito de la creciente melodía.

Una luz sin esplendor entra por la ventana, iluminando tenuemente  la sombra que se mueve  con brusquedad alrededor de mí, nadando entre la oscuridad como si de un mar se tratara, manchando las paredes con el espeso sudor oscuro de  su invisible cuerpo.

La luz desaparece.

Rasguños en las paredes, pisadas sobre el viejo piso de madera negruzca que rechina ante el contacto.  Alcanzo a oír que algo o alguien, ha caído con fuerza justo al otro lado de la habitación. Uñas se clavan en los espacios entre madero y madero. Un bulto se arrastra torpemente  por el piso, puedo sentir cada movimiento bajo  mis desnudos pies. Alguien respira con dificultad justo detrás de mí cuello, su aliento es helado y apesta a cenizas y piel chamuscada.

“Está bien, todo está bien”

Una ráfaga de luz entra nuevamente por la ventana iluminando a él pesado bulto que se arrastra en mi dirección.

No, no es un bulto, es algo.

Sus piernas de un  pálido color están completamente deformadas, están rotas. Sus manos ensangrentadas son las que le impulsan adelante. Su rostro, con profundos huecos carentes de ojos y boca putrefacta  apuntan hambrientos a mi dirección.

No tiene ojos pero sé que me mira.

La luz se ha ido una vez más, dejándome en completa oscuridad,  con aquella sensación de ser observado, con temor de que aquella cosa que se acerca a mí, me tome y me lleve consigo.
Fricción contra la madera del suelo. Sonidos guturales que opacan mi respiración dificultosa.

Quiero moverme, salir de ese maldito lugar de una vez por todas ¡no puedo moverme!

“Está bien, todo está bien” pienso.

Abro lentamente mi boca, pero lo único que sale de ella es un sonido apagado por el terror.

El sonido del bulto arrastrándose, aumenta cada vez más y más, hasta que se convierte en un solo sonido junto con los apresurados latidos de mi corazón.

De repente, gotas gordas y perezosas de agua comienzan a estrellarse contra la ventana, siendo iluminadas por la tenue luz de la luna.
Un gruñido lastimero acompañado con una risa infantil, penetra mis sentidos hasta provocarme una sensación de mareo.

Una línea de sudor corre lentamente por mi petrificada frente hasta entrar de lleno en mis ojos, obligándolos cerrarse para desaparecer el ardor.  

Mis pulmones se contraen entre mis costillas, no quieren respirar, no quieren ayudarme.  

Una luz entra por la ventana, acompañada por un sonido estruendoso de fuera, un trueno que anuncia el clímax de la tormenta.
Una vez más, el bulto deforme y ensangrentado  es iluminado. Ahora está más cerca,  puedo ver que sus brazos están cubiertos por cicatrices hinchadas y rojizas como si acabaran de sanar,  sus manos están deformadas a la falta de dedos –No eran uñas contra madera, era hueso contra madera- dejando en su lugar finas tiras de carne putrefacta que deja un camino apestoso.

La cosa deja escapar un gemido al mismo tiempo que clava sus codos al suelo y se impulsa, está a tan solo un metro de alcanzar mi pierna, lo único que puedo hacer el mirarle con terror.

Y enseguida  escucho un sonido muy familiar, que se ha enterrado en mis oídos con sus garras cubiertas del pasado.

El sonido del tocadiscos en el sótano, reproduciendo la canción que más detestaba, una canción que hablaba del odio y la muerte combinados.  Una mujer cantaba con desvelo, acompañada por una sonata muy desagradable para mi gusto. ¿Cómo es posible?

Grietas transparentes comienzan  a nadar sobre el cristal de la ventana y enseguida, este se cae con fuerza contra el piso, quebrándose en mil pedazos que se abren paso entre la habitación. Es como si alguien entrara por la ventana. Puedo ver las pisadas de agua marcándose sobre los pedazos de cristal.

Algo se aferra con fuerza a mis tobillos y una vez más, la luz entra por la ventana, iluminando al deforme bulto justo debajo de mí. Su desgarrada mano aferrada alrededor de mi muslo. Abre su boca hasta el tope, dejando escapar un gruñido animal, que combina perfectamente  con la música  lenta y siniestra que viaja por el aire.

-¿Tienes miedo?- una voz salió de entre las sombras. La cosa debajo de mi detiene su viaje lastimero hasta la cima de mi pierna.  

-Si- me sorprendí al escuchar mi propia voz, temblorosa y hecha añicos.  

-¿Quieres saber porque?- pregunta la extraña voz con  tono burlón. Dudo por unos segundos.

Los dientes del hombre frente a mis pies, se entierran con odio en mis pantorrillas. Y la música flotando en el aire, repetía una y otra vez la misma palabra.
El agresivo viento entró por la ventana, acompañado con las gotas de agua que golpeaban mi rostro. Tenían un sabor extraño, que petrificaba mi lengua y lastimaba mi olfato. Un sabor a hierro.

-…Si…- dije involuntariamente.

La voz rió gravemente hasta desvanecerse. La música se detuvo y las luces de las velas se encienden lentamente.
Al fin, puedo respirar con tranquilidad. Estoy a salvo….estoy bien…

Grito  al ver debajo de mí, al cuerpo de alguien que conocía tan bien, el cuerpo de mi amigo.  Y a un lado del cadáver, estaba un cuervo con plumaje azulado que me miraba profundamente con sus diminutos ojos negruzcos, trataba de decidirse entre continuar comiendo su festín o atacarme.
Mi amigo estaba apuñalado repetidas veces en la espalda. La sangre con un color profundo y brillante, aun no dejaba de fluir de las heridas.  E incluso sus piernas llenas de rasguños sufrían de espasmos que provocaban el sonido del crujir de la madera.

Retrocedí un paso, aterrado, trago saliva.

¡NO!

Fue entonces cuando mire a mi lado, un espejo que colgaba sobre la pared teñida de un rojo carmesí. Vi el reflejo de una persona, todo en ella estaba bañado en sangre, su piel, su cabello, su ropa, sus ojos, su rostro……
Me sonrió con histeria al mostrar el cuchillo oxidado que sostenía  en su mano. Soltó  una carcajada enseñando  sus dientes llenos de carne y sangre.
Levanta el cuchillo y se abalanza contra mí. Cierro los ojos, esperando que el arma entre de lleno en mi pecho, pero, lo único que se produjo fue un sonido de ruptura; era el espejo que se había quebrado justo en medio de mi reflejo.

Ahora lo entendía.

Sonreí con locura y eché a correr escaleras abajo en busca del tocadiscos para volver a reproducir aquella canción que tanto amaba.


 'Tocadiscos' en cuyos parrafos se menciona a un tocadiscos y una tragedia, como personajes principales.  Los personajes secundarios siempre son los afectados; elegidos por el tocadiscos y el gran sr del alquitran como victimas de sus cacerias. Locura y depravacion en una misma historia.
Me he inspirado en la letra de la cancion reclusion de Anberlin, es bastante siniestra la letra. Aqui un fragmento:

There's someone inside me that softly kills everyone around
They don't know they're dead to me cause intent never makes a sound
All along they found I strangled lovers who've learned from slower hands
With these eleven minutes I could teach you what I am

You're sick, sick as all the
Secrets that you deny
Sins like skeletons are so very hard to hide
You're sick, sick as all the
Secrets that you deny
Sins like skeletons are so very hard to hide

There's an art in seclusion. Production in depression
if a stranger turns up missing, this song is my confession
Tell the tales of the trail of dead, lovers learn from slower hands
Losing self in myself, inner demons make demands

Espero les guste
Los comentarios se aprecian :D

Galeria de tocadiscos: annmarcus63.deviantart.com/gal…
:bulletred:Tocadiscos -Ella es la tentacion-:annmarcus63.deviantart.com/art…
:bulletred:Tocadiscos -whisky-: annmarcus63.deviantart.com/art…
:bulletred:Tocadiscos Caroline: annmarcus63.deviantart.com/art…
:bulletred:Tocadiscos -manicomio-: annmarcus63.deviantart.com/art…

NO es una historia cronologica, leyendo cualquier capitulo podran comprender :3
espero les guste 
© 2014 - 2024 AnnMarcus63
Comments8
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ingridE98's avatar
me recordo a las historias de Poe me encantan... muy buena tu historia :D